Pruebas de punto de inflamación de nueva generación

El punto de inflamación es la temperatura más baja a la que un líquido, en las condiciones de prueba prescritas, desprende gas o vapor inflamable en una cantidad tal que aparece una llama al contacto con una fuente de ignición. El punto de inflamación no es una propiedad físicoquímica constante de las sustancias analizadas, sino que depende del instrumento de medición y del método utilizado. Por lo tanto, los puntos de inflamación solo pueden definirse en el marco de un procedimiento de ensayo estandarizado.

La razón principal de las mediciones del punto de inflamación es evaluar el riesgo de seguridad en términos de inflamabilidad. Cuanto más baja sea la temperatura del punto de inflamación, mayor será el riesgo de incendio. Esto se aplica al uso, almacenamiento o transporte, por ejemplo, en el caso de líquidos como los productos derivados del petróleo.

Otro enfoque importante es el control del proceso de producción dentro de la inspección de calidad, así como el análisis de líquidos a la llegada de mercaderías. Dado que incluso las impurezas menores tienen un efecto sobre el punto de inflamación, este tipo de mediciones, que pueden realizarse de forma rápida y sencilla, permiten una reacción inmediata ante las desviaciones.

ABA 500 y ABA
300 Con efecto inmediato, los nuevos ABA 500 y ABA 300 sustituyen al anterior medidor de punto de inflamación Abel ABA 4. Los dos modelos funcionan de forma totalmente automática y ofrecen un funcionamiento cómodo y moderno.

Dado que una muestra puede ser inflamable incluso a temperaturas bajo cero, el ABA 500 ofrece la posibilidad de medir el punto de inflamación hasta -30 °C (-22 °F) de temperatura de la muestra con un refrigerador externo. En raras ocasiones, las muestras con calor pueden provocar un incendio. Para contrarrestarlo, el ABA 500 está equipado con un sistema de detección y extinción de incendios, lo que convierte al instrumento en uno de los medidores del punto de inflamación más seguros del mercado.

El ABA 300 es el modelo básico de medidor de punto de inflamación de Abel. El sistema de detección y extinción de incendios es opcional en este modelo y el rango de aplicación limitado permite medir puntos de inflamación entre 10 °C y 110 °C (50 °F y 230 °F).

Materiales con un punto de inflamación bajo en foco
A diferencia del PMA 500 de Anton Paar, que se basa en el método Pensky-Martens y se utiliza a altas temperaturas de 20 °C a 410 °C, los medidores de punto de inflamación ABA 500 y ABA 300 de Abel impresionan con el análisis de puntos de inflamación a bajas temperaturas de hasta -30 °C y +10 °C. El campo de aplicación incluye sustancias muy fácilmente inflamables (productos derivados del petróleo, combustibles para aviones, disolventes, productos químicos, pinturas y revestimientos, residuos) en el rango inferior de temperaturas.