Detrás de escena: Gestión de proyectos

Tras varios años en diversos ámbitos técnicos, desde el sector automotriz hasta la ingeniería especial y la fabricación en plantas, en 2008 tuve la oportunidad de trabajar como desarrollador en Anton Paar. Pude, como ingeniero de diseño, trabajar en algunos proyectos increíbles. Me fascinaba ver cómo los instrumentos de medición de alta gama surgían de la interacción de varias disciplinas técnicas.

El desarrollo de instrumentos de medición complejos requiere a alguien que se ocupe de la coordinación de los distintos departamentos, por ejemplo, mecánica, hardware, firmware y software. Soy responsable de ello desde 2012 y, como jefe de proyecto, desarrollo en equipo diversos instrumentos de medición. Sin embargo, el papel de un jefe de proyecto no se limita a la coordinación de los departamentos. También aceptan el encargo del proyecto y son responsables de que se respete y tramite el alcance del proyecto en lo que respecta a calidad, plazo y costos.

Además de los proyectos de desarrollo «clásicos», el Área de Negocio de Reología también se ocupa de proyectos tecnológicos, proyectos de aplicación y proyectos de clientes. Los proyectos tecnológicos sirven a la investigación fundacional de nuevos principios de medición. Las tecnologías que de ahí se derivan constituyen la base de los nuevos proyectos de desarrollo. Para los proyectos de aplicación, los instrumentos de medición existentes se amplían con un campo de aplicación adicional. Esto ocurre frecuentemente en cooperación con universidades o centros de investigación. Como su nombre indica, las peticiones específicas de los clientes se gestionan en el marco de proyectos específicos de clientes, de modo que se puedan satisfacer deseos muy concretos.

Sin embargo, antes de que nazca una orden de proyecto para un equipo de desarrollo, tiene que haber un acuerdo cuidado entre la gestión del proyecto, la gestión del producto y el cliente. De este modo, las preguntas clave quedan respondidas de antemano. Por ejemplo: ¿qué exigencias se plantean al instrumento de medida? ¿Cómo debe posicionarse el producto en el mercado? ¿Qué efecto tendrán las exigencias sobre la duración y los costos del proyecto? Sobre la base de estas especificaciones se elabora el plan del proyecto, para el desarrollo de un instrumento de medida.

Con el inicio de un proyecto comienza una fase apasionante, durante la cual un equipo trabaja junto, normalmente durante años, en una tarea compleja. Eso crea camaradería e implica un camino a través de altos y bajos.

Gracias a nuestra alto nivel de fabricación y a los conocimientos técnicos asociados, nos es posible realizar la producción, verificación y validación de prototipos directamente en nuestras instalaciones. Algo que nos empuja hasta los límites de lo físicamente posible. Un gestor de proyectos se ocupa de estos retos desde el desarrollo, pasando por la transición en serie, hasta la introducción en el mercado. El cargo de jefe de proyecto o gestor de proyecto me fascina por la esencia múltiple y la originalidad de cada proyecto.

Para mí, el lema de Anton Paar, ʺGreat People – Great Instruments”, describe perfectamente nuestros proyectos de desarrollo.